La forma más básica de entender la permacultura es su expresión esencial que es una flor que representa los ámbitos en los cuales se aplica para poder encaminar una cultura sostenible. La flor de la permacultura se conforma por su núcleo, que es la base de la construcción, es como la brújula que señala el norte del camino; y siete pétalos, que son las áreas de incidencia. En este encuentro analizaremos el núcleo de la flor: sus principios éticos y de diseño.