Cada vez que un planeta en tránsito hace contacto con algún planeta o posición específica de nuestra carta natal, modifica esa función planetaria. Por lo tanto se están produciendo modificaciones internas sincrónicamente con sucesos externos personales.
La carta natal no es estática, no es una foto. Es un sistema con un orden de despliegue que nos actualiza y nos invita a descubrirnos constantemente.