RESUMEN:
Matías, reflexiona sobre las emociones y las sombras que se acumulan en nuestro ser. Reconoce que aquellos que causan daño son en realidad niños heridos en su interior. En lugar de juzgarlos, propone abrazarlos y sanar su dolor. Comprendió que la justicia va más allá del castigo, se trata de corregir y transformar. Ajustar las polaridades y equilibrar lo positivo y lo negativo es fundamental. Aprender de nuestros errores nos permite trascender y crecer.
FRASE:
“La oscuridad es la distorsión de la luz. Es la disonancia de la vibración armónica.”
EJERCICIOS:
- Meditación del niño interior: Encuentra un momento tranquilo y relajado para sentarte cómodamente. Visualiza a tu niño interior, el ser vulnerable y herido en tu interior. Imagina que lo abrazas amorosamente y le envías luz y sanación. Mientras mantienes esta visualización, repite en silencio la afirmación: “Sano y amo al niño herido dentro de mí y de los demás”.
- Meditación de equilibrio y armonía: Tómate un tiempo para sentarte en un lugar tranquilo y relajado. Centra tu atención en tu respiración y visualiza una energía positiva y una energía negativa dentro de ti. Imagina estas dos energías fluyendo y entrelazándose en perfecto equilibrio y armonía. A medida que respiras, siente cómo se equilibran y se integran en tu ser. Repite la afirmación: “Armonizo y equilibro las fuerzas opuestas en mí y en el mundo que me rodea”.
- Meditación de compasión y perdón: Busca un momento de tranquilidad y silencio. Respira profundamente y relaja tu cuerpo y mente. Enfoca tu atención en aquellos que han causado dolor intencionalmente. Visualiza a estas personas como niños heridos y envía amor, compasión y perdón hacia ellos. Repite en tu mente la afirmación: “Envío amor y compasión a aquellos que causan dolor, reconociendo que son niños heridos en su interior”.
- Meditación de ajuste y transformación: Siéntate en silencio y concéntrate en tu respiración. Visualiza la energía positiva y negativa en tu interior. Siente cómo estas energías se ajustan y equilibran, transformándose en una energía de amor y luz. Imagina cómo esta energía amorosa se expande y abraza a todos los seres del mundo. Repite la afirmación: “Ajusto y transformo las energías en mi interior y en el mundo, irradiando amor y luz a todos”.