RESUMEN:
En este diálogo se explora la conexión entre el niño interior y las aspiraciones actuales de Matías. Se destaca cómo los ídolos y experiencias de la infancia han influido en sus intereses y sueños presentes. Se descubre cómo los impulsos tempranos han influido en su carrera y su enfoque pedagógico actual. La conversación también explora cómo los impulsos internos y externos interactúan para despertar la pasión y la voluntad de actuar. Matías se da cuenta de que sus ídolos de la infancia han moldeado su camino y comprende la importancia de honrar los deseos de su niño interior. La conversación culmina con el entendimiento de que ser auténtico consigo mismo y seguir los sueños de la infancia es el camino hacia un servicio significativo y un crecimiento continuo. La idea central es que conectarse con el niño interior y sus aspiraciones es la clave para desencadenar el potencial y el propósito en la vida adulta.
FRASE:
“La única forma de ser quien buscas ser en tu vida es si le haces caso a ese niño o niña que has acallado por años en tu interior.”
EJERCICIOS:
- Visualización del Niño Interior: Cierra los ojos y lleva tu atención hacia adentro. Imagina que te encuentras en un lugar tranquilo y seguro. Visualiza a tu niño interior, ese ser inocente y auténtico que una vez fuiste. Observa cómo te ves, cómo te sientes y qué deseos tienes. Escucha las palabras de ese niño interior. Hazle preguntas sobre sus sueños y aspiraciones. Escucha atentamente y siéntete conectado con él. Esta práctica puede ayudarte a descubrir deseos y sueños olvidados que aún resuenan en ti.
- Diálogo con tu Niño Interior: Encuentra un momento tranquilo y siéntate en un lugar cómodo. Cierra los ojos y respira profundamente. Imagina a tu niño interior sentado frente a ti. Comienza un diálogo con él. Pregúntale sobre sus sueños, lo que solía amar hacer y lo que deseaba ser de mayor. Escucha sus respuestas con atención y amor. A medida que conversas, siente la conexión y la energía de tus recuerdos de infancia. Agradece a tu niño interior por compartir contigo.
- Carta al Niño Interior: Siéntate con papel y pluma. Escribe una carta desde tu yo adulto a tu niño interior. Expresa amor, comprensión y apoyo. Comparte tus recuerdos de la infancia y agradece por los momentos felices. Anímale a seguir soñando y explorando. Luego, cambia de rol y responde como tu niño interior, expresando sus pensamientos y emociones. Esta práctica puede ayudarte a fortalecer el vínculo con tu niño interior y fomentar la sanación.